lunes, 7 de mayo de 2012

Nerones de hoy

Los artistas, los de verdad, los artistas puros, tienen un principio de locura porque actúan bajo la premisa huidobriana del Non-Serviam. Les gustaría ver horizontes cuadrados. Pero el artista tiene habilidad con las manos, y últimamente habilidad con las computadoras y, si tiene fondos del estado, puede tener habilidad con lo que sea porque subcontrata hasta a un experto nuclear iraní si es necesario. Claro, porque quizá considera que es muy bello un hongo atómico lanzado sobre diez mil niños con hambre y, con esa metáfora, lanza un misil iraní sobre un país africano pobre. Luego, fotografías. Luego video. Luego museos. Luego entrevistas. Luego rusos megamillonarios del petróleo llamando para conocer la última irreverencia, la nueva tendencia, la nueva frontera artística. Pero resulta que no hay novedad en ello. La idea se le ocurrió primero a Nerón. El dijo “sería bello ver ardiendo Roma”. Y la quemó. Y luego compuso su canción a la destrucción de la ciudad. Para él, Roma era solo una escenografía.

No hay comentarios: